-El tarot ha de ser leído con espontaneidad y precisión.-Nunca hay que forzar su lectura; más vale una interpretación sencilla y clara que otra llena de grandes fantasías y confusa.
-La interpretación varía según la percepción de la persona que lo lee.
-La gimnasia imaginativa que proporciona el Tarot es personal e
intransferible.
-A la persona que interpreta el Tarot la llamaremos Lector y Consultante a la que trata de conseguir las respuestas.
-Consultante y Lector, colocados frente a frente, han de sentirse cómodos,
-A la persona que interpreta el Tarot la llamaremos Lector y Consultante a la que trata de conseguir las respuestas.
-Consultante y Lector, colocados frente a frente, han de sentirse cómodos,
mantendrán silencio y gran serenidad.
Las cartas del Tarot serán barajadas o mezcladas por ambas partes para impregnarlas de esa maravillosa electricidad o magnetismo que todos poseemos. el como buen psicólogo, observará detenidamente a la Consultante para poder penetrar en ella y captar su pensamiento. el lector, seguro de su potencial, hará que las primeras cartas que saque el Consultante, respondan simbólicamente al motivo más importante del Consultante.
Aunque tradicionalmente el consultante suele hacer una pregunta específica,
Las cartas del Tarot serán barajadas o mezcladas por ambas partes para impregnarlas de esa maravillosa electricidad o magnetismo que todos poseemos. el como buen psicólogo, observará detenidamente a la Consultante para poder penetrar en ella y captar su pensamiento. el lector, seguro de su potencial, hará que las primeras cartas que saque el Consultante, respondan simbólicamente al motivo más importante del Consultante.
Aunque tradicionalmente el consultante suele hacer una pregunta específica,
hay gente que prefiere no revelar información personal, especialmente si
es algo escéptico respecto a la habilidad psíquica del lector.
A veces, los consultante hacen preguntas irrelevantes, porque no se atreven a expresar o incluso a enfrentarse a lo que realmente les preocupa. A pesar de ello, un lector intuitivo puede ofrecer el consejo adecuado para resolver el verdadero problema.
A los lectores con fuertes poderes telepáticos, les preocupa que puedan conectar directamente con
la mente del consultante y no con su propio supraconsciente.
Por ello, insisten en usar una segunda baraja de cartas.
El consultante baraja y reparte en persona, y se comprueba que la evaluación psíquica sea la misma.
Es interesante ver cómo los símbolos responden al estado actual del Consultante: salud, profesión,
amores, etc.
El Tarot se compone de 78 cartas divididas en dos grupos:
22 cartas simbólicas, llamadas Arcano Mayor y 56 cartas llamadas Arcano Menor.
A los lectores con fuertes poderes telepáticos, les preocupa que puedan conectar directamente con
la mente del consultante y no con su propio supraconsciente.
Por ello, insisten en usar una segunda baraja de cartas.
El consultante baraja y reparte en persona, y se comprueba que la evaluación psíquica sea la misma.
Es interesante ver cómo los símbolos responden al estado actual del Consultante: salud, profesión,
amores, etc.
El Tarot se compone de 78 cartas divididas en dos grupos:
22 cartas simbólicas, llamadas Arcano Mayor y 56 cartas llamadas Arcano Menor.
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